El Efecto Ganador: ¿Cómo Afecta el Éxito a la Química Cerebral?

Tengo curiosidad por conocer el "efecto ganador". ¡Aquí descubrirás cómo el éxito afecta a la química cerebral y a los cambios que experimentas en ti después de ganar!

Si pensamos en la evolución, uno de los conceptos que primero vendrá a nuestra mente es "la supervivencia del más apto". Sabemos que tenemos que adaptarnos a los cambios del entorno y no podemos perder si queremos sobrevivir. Desde el principio, se nos enseña a ser ganadores si queremos sobrevivir.

¿Pero alguna vez has reflexionado en por qué tienes que ganar para sobrevivir? ¿Cómo impacta la victoria en tu cerebro y te da confianza para enfrentarte a todo en la vida? ¡Continúa leyendo para conocer el efecto ganador en detalle!

¿Qué es el Efecto Ganador?

En biología, "el efecto ganador" se define como un fenómeno o sentimiento que una persona siente cuando gana algo frente a un oponente. Los animales también sienten el efecto ganador, pero su victoria solo se limita a la batalla física. Por el contrario, los humanos pueden vencer a los demás recreativa, educativa y físicamente, por lo que tienen múltiples escenarios para experimentar la sensación que tienen después de ganar.

La Testosterona y el Efecto Ganador

La Testosterona, junto con la dopamina, juega un papel importante en el efecto ganador. Es una hormona liberada antes y durante la competición(1). Cuando comience la competición, todos los competidores tendrán un fuerte aumento de sus niveles de testosterona. Pero, después de que la competición haya terminado, solo los ganadores tendrán alta la testosterona, mientras que los niveles de testosterona de los perdedores habrá caído. La caída de la testosterona en los perdedores también se denomina "el efecto perdedor".

La testosterona está vinculada a la agresión y a la violencia, pero también puede inducir comportamientos protectores de seres queridos y amigos cercanos. Esto es lo que dijo Po Bronson sobre la testosterona en una entrevista:

“La colaboración y la competencia son la misma hormona: testosterona.    No existe la colaboración sin la competencia en el mundo real.   Competir no significa engañar o romper las reglas, significa ir de frente y ser mejor que tu oponente.    Sin duda, dentro de una corporación, la gente necesita colaborar para que la corporación sea competitiva.”  

¿Cómo Afecta el Éxito a la Química Cerebral?

Cuando ganas (2), los cambios en tu cerebro te hacen más inteligente y seguro de ti mismo en tus desafíos futuros. La confianza que obtienes al ganar te permite superar desafíos aún más difíciles que podrían parecer difíciles si no hubieras ganado. Tanto si compites como si no, tu cerebro está midiendo continuamente tu capacidad, fuerza y estado en comparación con otros. Después te prepara para luchar contra un oponente o ganar una competición alterando tu inteligencia y comportamiento de una manera que te mantenga a salvo.

Cuando consigues victorias consecutivas, tu cerebro cambia haciéndote más inteligente para mantener la posición. Sin estos cambios positivos en tu cerebro, no podrás mantener la posición durante mucho tiempo, porque el exceso de confianza no te permitirá lidiar con situaciones de forma práctica y perderás.

¿Son Siempre Positivos los Resultados del Efecto Ganador?

No, los resultados del efecto ganador(3) no siempre son positivos. Cuando ganas dos veces, tu cerebro tiene un efecto ganador tan fuerte que no pensarás nada antes de hacer lo mismo una tercera vez.

El fracaso te devuelve a las realidades básicas y a tu debilidad, y ayuda a mejorar tu comportamiento y personalidad para futuros desafíos. Por el contrario, ganar puede hacer que tengas demasiada confianza, por lo que no te prepararás para circunstancias cambiantes. Tus oponentes pueden volverse más fuertes e inteligentes, pero no serás capaz de manejar la situación de forma adecuada debido a tu exceso de confianza.

¿Cómo Puedes Utilizar este Efecto a Tu Favor?

Puedes utilizar este efecto a tu favor analizando la situación en detalle. No generalices tus experiencias ganadoras anteriores a una segunda vez porque la primera vez podría ser suerte, pero la segunda vez será estupidez, ya que muchos factores podrían haber cambiado. Por lo tanto, debes responder a cada situación tras considerar todos los factores relacionados con ella, no con tu experiencia previa.

Por ejemplo, si un cazador se ha encontrado con un oso y lo ha matado con éxito por primera vez, no significa que también tendrá suerte la segunda vez. El segundo oso podría ser más poderoso que el primero y nada fácil de atrapar. A menos que se considere brillante luchando y matando a un oso, no debería intentarlo basándose solo en aquella experiencia.

Lo prudente será evaluar una nueva situación por separado, todos los factores, y luego decidir un movimiento adecuadamente. Tus experiencias pasadas deberían hacerte lo suficientemente sabio como para evitar escenarios diferentes a los de tu pasado.

Conclusión

El efecto ganador explica cómo tu cerebro te hace inteligente y seguro de ti mismo cuando ganas. Como resultado de ganar, se producen cambios en tu cerebro, incluyendo   cambios hormonales  también. Asegúrate de no tomar decisiones estúpidas debido a tu exceso de confianza al haber ganado en el pasado. ¡Evalúa cada situación desde el principio y decide después de considerar todos los factores nuevos y diferentes de tu experiencia ganadora pasada!

Referencias

https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/27926439/

https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/27619945/

https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/35108262/